La frase “masticar es importante para la digestión” seguro que la has escuchado, sin embargo es muy probable que no conozcas a nadie, o a casi nadie, que lo practique. Realmente, lo más común es que las personas traguen sin apenas masticar ni disfrutar de la comida, ya sea por hábito, por falta de atención o por prisa y estrés.

Aunque se lo atribuimos a otras causas, la mala masticación está asociada a problemas digestivos, sobrepeso, cansancio y ansiedad.

Si te fijas en un niño, del mismo modo que respira como el mejor de los yoguis, de forma profunda, completa y desde el vientre; también mastica y ensaliva minuciosamente todo lo que ingiere antes de tragar. Esta habilidad la perdemos en el camino en la medida que nos incorporamos a la vida de adultos y sus quehaceres.

Gandhi decía: “bebe tu comida, y come tu bebida”

Masticar minuciosamente los alimentos trae grandes beneficios, entre ellos, una digestión más ligera, mayor aprovechamiento de los nutrientes, mejor equilibrio emocional y placer, además de ayudar definitivamente a perder peso y a no recuperarlo.

Beneficios de una buena masticación

  • Masticar adecuadamente permite triturar bien  los alimentos, mezclarlos con la saliva que esta llena de enzimas y convertirlos en un bolo alimenticio perfectamente digerible; cuando no masticas entonces aparece la indigestión, acidez, gases o estreñimiento.
  • Ayuda a calmar al sistema nervioso y aumenta la cantidad de oxígeno en el cuerpo, lo que reduce la ansiedad durante la comida.
  • Produce enzimas que permiten la digestión de los carbohidratos y la absorción de sus nutrientes.
  • La sensación de saciedad se alcanza más rápido, evitando comer en exceso.

Trucos para masticar despacio

  • La clave es estar presentes en lugar de estar en modo automático.
  • Comienza realizando 3-5 respiraciones profundas, conectar con tus 5 sentidos y agradecer por estos alimentos… ¡Somos realmente afortunados!
  • Se recomienda masticar aproximadamente 30 veces cada bocado, aunque en función del tipo de alimento puede variar.
  • Introduce en la boca pequeños fragmentos de comida en lugar de llenarla. Si la llenas, es bastante probable que sientas antes la necesidad de tragar. Puede ayudarnos dejar los cubiertos en la mesa entre bocado y bocado, o comer con palillos.
  • Come en un ambiente tranquilo, lejos de tele, radio o ruidos. Cualquier cosa que te distraiga hará que no prestes atención a la cantidad de veces que masticas.
  • Disfruta de los alimentos, deléitate con su sabor, su textura, cómo se deshacen en la boca, cómo te nutren.

En resumen, la masticación es un arte y es nuestra aliada de longevidad, vitalidad y belleza. Masticar para apreciar el alimento, para deleitarnos, para nutrirnos, para relajarnos, para estar más felices y más presentes en la vida, para estar más sanos por dentro y más bellos por fuera.